Cuarto y último artículo de Julio Lacuerda, secretario general de FSP-UGT sobre el TISA y sus repercusiones sobre los ciudadanos europeos.
Los tratados destinados a promover el comercio internacional deben preservar plenamente la capacidad de los gobiernos de restaurar, revitalizar o ampliar los Servicios Públicos, excluyéndolos de su contenido. Con disposiciones de este tipo se beneficiaría al conjunto de la ciudadanía, tradicionalmente excluida en el ámbito competencial mundial. De momento, el TISA no va por ahí, sino todo lo contrario.